martes, 19 de mayo de 2015

"Mandarinas": una película contra la guerra (Multicines Monopol)


“Mandarinas” (Multicines Monopol en Las Palmas de Gran Canaria) es una película de guerra, candidata que fue al Oscar a la mejor película en lengua no inglesa. Con sus 83 minutos de metraje, es una pequeña obra maestra sobre la fraternidad humana frente a la violencia humana. Hecha entre productores de Estonia y de Georgia, para hablar de esas guerras balcánicas que han destrozado Europa en los últimos años. Un ejemplo de cómo plasmar en la gran pantalla la virulencia de una guerra con poquísimos pero muy potentes referentes de la contienda. Un film que lleva la lucha armada al terreno de la metáfora, al relato íntimo, a espacios más simbólicos y a contextos más amplios y atemporales. Sus diálogos son sabios y serenos. Su drama aflora poco a poco, sin caer en estrategias lacrimógenas. Habla por encima de todo de la condición humana. Y además, nunca olvida su realidad histórica, de forma que, aun pudiendo sentir en cada instante la tensión de una guerra vecina, las irrupciones de ésta sacuden al espectador con la virulencia de un misil que estalla a pocos centímetros de nuestro rostro, como un recordatorio de la crudeza de los acontecimientos que tienen lugar más allá de los cultivadores de mandarinas, que son capaces de dejar de lado su pequeño negocio para acoger a víctimas de los dos bandos que se enfrentan hasta la muerte.

2 comentarios:

  1. Juan Calero Rodríguez20 de mayo de 2015, 19:17

    La Europa oriental ha llenado las pantallas de cine con los conflictos de guerras, sobre todo la II Guerra Mundial. Entre los directores que me vienen a la mente, por las tantas veces que hemos visto sus obras, están dos grandes artistas: el húngaro Miklós Jancsó y el polaco Andrzej Wajda. De la antigua Yugoslavia también he visto buen cino bélico, por eso no me extraña que ésta, Mandarinas, pueda ser una joya.

    ResponderEliminar
  2. Un film noble, conmovedor, valioso... deviene en un sosegado film de denuncia, accesible, en alegato ético, contra la guerra ... un ejercicio de cordura, proyectado en la pantalla...digno.

    ResponderEliminar