LUIS LEON BARRETO ------------------------------------------------------------------------------------------correo: leonbarreto49@gmail.com
martes, 26 de julio de 2022
Este jueves, "El volcán y otros cuentos", en Los Llanos de Aridane
viernes, 22 de julio de 2022
Presentación de "Pintura número 100", de Samir Delgado, en Lanzarote
Este libro recoge 60 poemas que consolidan un proceso de escritura poética donde Samir Delgado dialoga con el arte de César Manrique con motivo del centenario del nacimiento del artista canario (1919-1992). Y elige para dar título a su poemario la obra ‘Pintura número 100’, que luce en el Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca desde su apertura en 1966, y que fue realizada mediante la utilización de óleo y tierra sobre el lienzo en 1962.
Se trata de una pieza que Delgado entiende como «una herida para la mirada que recuerda el dolor y el paso del tiempo para sembrar conciencias de estas cosas en el ciudadano de hoy que está sometido al consumismo».
Samir Delgado (Las Palmas de Gran Canaria, 1978) Poeta, crítico de arte y periodista freelance. Licenciado en Filosofía por la Universidad de La Laguna y Máster de Investigación en Prácticas Artísticas y Visuales por la Universidad de Castilla-La Mancha. Investigador especializado en arte y literatura contemporánea, desarrolla proyectos internacionales en festivales y espacios de cultura en Europa, Estados Unidos y América Latina con líneas de investigación sobre la temática del imaginario atlántico y el exilio de los poetas republicanos en México, New Media Art y las poéticas de la insularidad. Ha sido tallerista de literatura creativa para la UNESCO, locutor de radio y colaborador habitual de medios de prensa escrita y digital en Canarias, Castilla- La Mancha y México. Ha gestionado proyectos de intercambio artístico y promoción cultural exterior con el patrocinio del Programa “Canarias Crea” del Gobierno de Canarias. Integrante fundador del proyecto interdisciplinar “Leyendo el Turismo, 3 poetas”. Actualmente es redactor en la Revista Trasdemar de Literaturas Insulares.
Como autor ha editado los libros de ensayo “De Guajara a Tafira. Travesías del movimiento estudiantil canario” (2005) y “Una casa mal amueblada” (Baile del Sol, 2010), los poemarios “Última postal desde Canarias”(2006), “Poema global de la ciudad turística”(2007), “Un libro contra el fuego (2009)”, “Tratado del Carnaval en Niza” (Ediciones Idea, 2011), “Cuando Venecia y el mar” (Colección Literaria Leucade, 2014), y los libros “Banana Split”, galardonado con el XXIV Premio de Poesía Emeterio Gutiérrez Albelo (2010), “Galaxia Westerdahl” galardonado con el XV Premio Internacional de Poesía Luis Feria de la Universidad de La Laguna (2014) y “Pintura número 100” galardonado con el XXV Premio Internacional de Poesia Tomás Morales del Cabildo de Gran Canaria, así como otros premios como la colección de cuentos “Los jardines imposibles”, Premio Milenio del Reino de Granada, (Fundación Andalusí, 2013) y el IV Premio Umbral de Poesía de Valladolid, Bicentenario José Zorrilla (2017). En 2016 el Gobierno de Canarias publica su libro “Las geografías circundantes. Tributo a Manuel Millares” en homenaje al pintor canario. Y en 2019 presenta sus obras literarias más recientes: “Los poemas perdidos de Luis Cernuda” (Literatelia, Toluca) y “Jardin seco” (Bala Perdida, Madrid). En 2020 recibe el Prix International de Littérature Antonio Machado, en Collioure (Francia) por el libro “La carta de Cambridge”, publicado por Olifante, 2021.
Asiste como artista invitado y conferenciante en eventos internacionales como el “Forum des Langues du Monde” (Toulouse, 2009), el I Salón Internacional del Libro Africano (SILA, 2009), el XV Festival Internacional de Poesía de La Habana (2010), la Tertulia Literaria “La Ambulante” de Colonia y el Instituto Cervantes de Francfort (Alemania, 2014-2016), el Centro Español de Cultura en México D.F., el Centro para la Paz de Jerusalén (Ramallah, 2015), el 26º Festival Internacional de Poesía de Medellín (Colombia, 2016), el 21º Encuentro Internacional de Poetas (Zamora, Michoacán, 2017), el Festival Internacional de Poesía Latinoamericana (FEIPOL, Estados Unidos, 2017), el V Encuentro Internacional de Escritores José Revueltas (Durango, 2017), El Salón de Poesía de la Universidad de Nuevo León (2018), la Guagua Poetry Festival de Boston (Estados Unidos, 2018), el Festival Internacional de Poesía Ramón López Velarde en Zacatecas (2019) o el Festival Kerouac en Vigo 2019. Poemas suyos han sido traducidos al inglés, portugués, alemán, rumano, italiano y árabe en revistas especializadas.
Ha formado parte del Jurado del Premio Internacional de Literatura Africana “Amadou Ndoye” de la Universidad de La Laguna y gestiona el blog de autor “Purpuraria”.
miércoles, 20 de julio de 2022
Los cuentos del volcán
Da mucha pena volver a la parte occidental de La Palma y comprobar el estado del territorio, simplemente arrasado. Y es que en la Isla Bonita hay dos islas: la oriental, en la franja Santa Cruz de La Palma/Barlovento, y la occidental, cuyo centro neurálgico es el valle de Aridane, que, a su vez, es el territorio donde brotan con más frecuencia los volcanes, la mejor zona platanera, el motor productivo de la isla, donde vivían miles de alemanes. Este último volcán ha dejado unos daños impresionantes, no solo en cuanto a la pérdida en viviendas, infraestructuras y terrenos de cultivo sino también en el ánimo de las personas. El estado actual del Valle es el de una notable depresión, muchos negocios cerrados, muchos establecimientos engullidos por la lava, escasez de turismo, en definitiva allí se está viviendo un duelo prolongado. El volcán mantiene reductos con altas temperaturas y no se sabe cuándo se podrá volver a la zona de Puerto Naos-La Bombilla, con docenas de establecimientos cerrados, con un hotel clausurado, con las viviendas sometidas a peligrosas emanaciones de gases. El volcán podría ser un atractivo para los visitantes dentro de unos años, pero no cuadra esa posibilidad mientras los habitantes del lugar sigan padeciendo las consecuencias de la devastación: carreteras que ya no existen, equipamientos vecinales e iglesias que forman parte del recuerdo, viviendas que se fueron al limbo mientras los intentos de reconstrucción avanzan con mucha dificultad. La gente se queja de que las ayudas tardan en llegar, y sobre todo se aprecia que la reconstrucción será muy lenta. Bien es verdad que, tal como dice el presidente del Cabildo, los palmeros se han acostumbrado a resistir. Además de los terribles daños materiales, pudiera ser, además, que los habitantes de los tres municipios hayan estado inhalando gases perjudiciales a lo largo de la terrible erupción, cuyas consecuencias en la salud serían graves. En este estado de cosas, han salido ya algunas reflexiones literarias sobre el volcán. La escritora Lucía Rosa González, autora de un magnífico Diario del Volcán, ha visto aparecer su texto traducido al alemán. También se ha publicado algún libro con una colección de fotografías que ha tenido gran acogida, y en la Feria del Libro de la ciudad de Las Palmas fue presentado El volcán y otros cuentos, Centro de la Cultura Popular Canaria, es un libro de 224 páginas del cual soy autor y que contiene 50 relatos escritos a lo largo de la pandemia y del estallido del volcán. En un cuento lleno de intensidad, Marta, una niña de 9 años, nos cuenta sus emociones y sus miedos cuando la lava se aproxima a la casa de sus padres y tienen quince minutos antes de ser desalojados. No quiere perder a sus animalitos, no quiere abandonar su niñez. Una vez más, en La Palma la lava brota por varias bocas, un río de fuego sobre el lecho de antiguas erupciones. En las 50 historias que integran el libro hay tragedia y esperanza, ironía, humor y nostalgia por el paraíso perdido. Un libro de emociones, de reflexiones acerca de lo vulnerable de la condición humana. Francisco J. Quevedo, profesor de Literatura de la ULPGC, lo explicó en su trabajo de presentación del libro. Como testigo de unos acontecimientos excepcionales, no tenía otro remedio que tomar partido por las víctimas de esta situación, de la pandemia y de las circunstancias tan adversas en que nos movemos. Un libro que, en definitiva, viene a ser un homenaje a la tierra natal, a la cultura rural y sobre todo a la capacidad de supervivencia que han demostrado los palmeros, siempre dispuestos a levantar de nuevo sus casas y sus huertas aunque venga otro volcán, siempre encontrar razones para seguir adelante. Y eso es, a fin de cuentas, es lo más importante. El ser humano convertido en reconstructor infatigable. |
jueves, 7 de julio de 2022
Una joya de la literatura de Bolivia
En una de las entrevistas concedida por Gabriel García Márquez, relacionada con el reportaje y su técnica de aplicar el realismo mágico al lenguaje periodístico, éste nos dice lo siguiente: “La vida cotidiana en la América Latina nos demuestra que la realidad está llena de cosas extraordinarias […] Basta abrir los periódicos para saber que entre nosotros suceden cosas extraordinarias todos los días. Conozco gente inculta que leyó ‘Cien años de soledad’ con mucho placer y con mucho cuidado, pero sin sorpresa alguna, pues al final no les contó nada que no se parezca a la vida que ellos viven”.
El caso es que la imaginación popular de Hispanoamérica mueve montañas y crea mitos. De ahí que Gabo dijera que su obra cumbre fuera leída con naturalidad, incluso por gente inculta. Es decir, lo ve como una característica del ser hispanoamericano, concretamente de Colombia.
No quiero decir con esto que ‘Santo Vituperio’, del narrador boliviano Homero Carvalho Oliva, responda exactamente a las fórmulas del boom de la narrativa hispanoamericana, pues junto a esa imaginación popular, la alternancia de voces narrativas, etcétera, nos encontramos con otros ingredientes que son propios del autor. Muchas vueltas ha dado la escritura desde estas declaraciones.
Vayamos a las declaraciones de un narrador de esta orilla, casi coetáneo de Homero. En una entrevista concedida al Diario de Avisos por el periodista y novelista Juan Cruz Ruiz se le pregunta si la memoria tiene más de mentirosa o de reconstructora permanente del pasado. A lo que el novelista canario responde que es bueno que exista la memoria para escribir ficción, aunque lo realmente fundamental es contar con la libertad para manejarla como nos dé la gana. Quien se pone a escribir una novela solo debería tener la obligación de ajustarse a una regla: no existen reglas. Mentira, ficción, imaginaciones hermanadas. Y, por supuesto, también la visión que se expresa con los dialectalismos locales que, hemos comprobado, enriquecen la literatura escrita en español.
Y justamente nuestro novelista boliviano Homero Carvalho Oliva, aparte de lo ya dicho, juega con la idea de memoria y mentira en ‘Santo Vituperio’. O más bien su personaje principal, Julián Paz, quien, a partir de una historia cotidiana, es capaz de transformar la conciencia de toda la ciudad inventada de San Lorenzo, que podría ser identificada por las descripciones con Santa Cruz de la Sierra, la ciudad natal de Homero Carvalho.
Una novela coral
Ante el terrible asesinato de una prostituta llamada Inés de las Muñecas, Julián, periodista y escritor, que frecuenta los cafés de la ciudad de San Lorenzo, no solo por gusto sino porque está escribiendo un reportaje sobre lo que acontece en esos establecimientos y sobre las virtudes y características de la bebida, decide hacer un experimento para comprobar ciertas lecturas sobre el comportamiento de los marginados social y económicamente. Junto al reguero de sangre que queda en la esquina donde la desafortunada Inés fue asesinada, tras el levantamiento del cadáver, Julián decide poner una vela cada noche y difundir el rumor de que Inés, la prostituta santa, hace milagros a quienes creen en ella. El efecto es tal que hace que estos milagros sucedan, según cuentan los personajes a lo largo del libro.
Es una novela coral en donde los personajes principales y secundarios hacen de narradores y aportan su punto de vista sobre el asesinato, los posibles orígenes de la víctima y los pormenores en cuanto a su posible canonización. Incluso tenemos la versión de la propia Inés que nos cuenta su historia de antes de ser asesinada. Muchas veces se trata de noticias contradictorias; pero hay un, digamos, narrador invisible que nos hace ir atando cabos a los lectores y esto habla mucho de la gran maestría de Carvalho. Hay que destacar el papel de los intelectuales que se agrupan en torno a las tertulias de los cafés, que en su mayoría representan a una clase media liberal, con sus contradicciones y aciertos. También es importante destacar las noticias de los periódicos, pues cuentan acontecimientos (que nos sitúan en un momento histórico) de la región y también proporcionan un punto de vista, a mi entender, acorde a las palabras reseñadas de García Márquez al principio de este escrito.
Por otro lado, está el papel de la Iglesia Católica que, a través del sacerdote Pedro María Almanza, al que le asignan la tarea de entrevistar a muchos testigos (ahí los puntos de vista narrativos de los que hablaba), la mayoría de las clases bajas y devotos de la santa de la calle. Con ello, por encargo de sus superiores, intenta desvelar la mentira de los milagros de Inés. La intención del clero local es ganarse a las congregaciones católicas y tradicionalistas de San Lorenzo. Pero cuando el padre Pedro creía haber desvelado los secretos de Inés de las Muñecas, sucede algo inesperado en la conciencia del sacerdote. Sin embargo, el principal protagonista es toda la ciudad de San Lorenzo, de ahí el carácter coral o polifónico de la novela.
Santo Vituperio es una novela muy densa, a pesar de ser corta. También sabe apropiarse del silencio, música y poesía. Tiene un ritmo vertiginoso, escenas cuadros y tono cinematográficos. No me extraña que quiera llevarse al cine. Su primera edición data del 2003 y ahora, con esta edición digital de Narrativa Iberoamericana de la Editora BGR, ya van 10, lo que da cuenta del éxito que tuvo entre los lectores. Sobre todo, por la actualidad que representa la obra, pues enlaza el realismo mágico y la crónica periodística de García Márquez con la novela de género negro. Claro, un realismo mágico solo basado en las consecuencias del hambre y el abandono de las clases más bajas y el subsiguiente empeño en creer en cuestiones más allá de lo predicado por la Iglesia Católica. Esas creencias que dan esperanza, aunque estén basadas en la mentira.
La terminología
En cuanto al léxico, sin exagerar, se utilizan términos de Bolivia, como ‘choca’, ‘macanuda’, “cunumi”, pero sin caer en un localismo folklórico. El lenguaje connotativo aparece, en clave de humor, por medio de la ironía y el sarcasmo que, dicho sea, es parte del habla y la idiosincrasia popular, lo cual le da mucha verosimilitud al conjunto. Así, una ironía puede recibirse como un cambio de perspectivas o una frase que revela cosas ocultas en lo dicho; mientras que el sarcasmo suele recibirse como un comentario más destructivo, malintencionado, que al ser descubierto suele generar malestar en el otro. Dicho de otro modo: si no arremete contra nadie, no es sarcasmo.
A veces, la ironía aparece en la parodia popular de los ritos de santos, al querer encumbrar a una prostituta a los altares. De esa manera, al imitar unos rituales que a los marginados sociales de nada les ha servido, el lado contrario (la iglesia oficial) se toma esos hechos como una burda parodia y un sarcasmo, pues compromete sus principios tradicionalistas. Por supuesto, todos los estratos sociales utilizan estos procedimientos según el contexto: los intelectuales de los cafés, los propios sacerdotes, las representantes de las cofradías católicas. Parece ser que es una manera del habla de San Lorenzo, aunque no exclusiva. También ocurre en Canarias, sobre todo en la Isla de La Palma que, a pesar de ser devastada por un volcán, los isleños no pierden el sentido del humor. Es universal de todos los pueblos marginados. Duke Ellington decía que, a pesar de todos los sufrimientos de los negros norteamericanos, el cantante de jazz debía sonreír hasta el punto de mostrar su dentadura.
Y teeth of jazz (también mucho de jazz) tiene Santo Vituperio, esa censura o desaprobación que cierto sector de la sociedad siente por una prostituta que el pueblo considera santa. Toda paradoja hace más real los hechos. Y Santo Vituperio es la gran paradoja del pueblo boliviano. De ahí el éxito de esta gran novela. Como diría Gabriel García Márquez, la gente se siente identificada y lee con total naturalidad.
Gáldar, Islas Canarias.
15 de junio de 2022.
miércoles, 6 de julio de 2022
Lectura poética de obra de Samir Delgado, en París
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lunes, 4 de julio de 2022
Artebirgua: 50 escritores en la cumbre
Varias docenas de
escritores de las islas y de fuera se reunieron durante tres días en
Juncalillo, esa cumbre vaciada de Gran Canaria, entre ellos Elsa López, Cecilia
Domínguez, Manuel Díaz Martínez, Isa Guerra, Sabas Martín, Félix Hormiga, Marcial
Morera y Gonzalo Ortega, catedráticos de la universidad de La Laguna y miembros
de la Academia Canaria de la Lengua, Antonio Arroyo y Estaban Rodríguez por
parte de la organización, así como un colectivo de jóvenes poetas, autores de
teatro, músicos y narradores. Era un buen encuentro, porque no se trataba de
sesiones a través de las tecnologías sino que eran debates presenciales. Manuel
Díaz García, cariñosamente conocido como El panadero porque esa ha sido su
profesión, es el inventor de estos debates cumbreros que intentan revitalizar
esta comarca. Nacido en Juncalillo en 1974 es promotor cultural, prologuista, poeta,
presentador de actos culturales y sobre todo animador social, un activista
capaz de pelear una y otra vez porque no muera esa cumbre de belleza especial. Por
eso se ha quedado a vivir en estos riscos despoblados de la isla, con su mujer
Noelia, por eso es capaz de seguir peleando con las instituciones para arañar
unos euros que le permitan seguir planteando proyectos, a la vez que se
mantiene firme cuando se trata de cultivar su vocación literaria. Los coloquios
fueron intensos, la programación era muy apretada, el frío nocturno era de 11 grados,
con niebla y llovizna. Al final todo culminó con el masivo homenaje a Elsa
López y una sesión musical en la iglesia de Santo Domingo de Guzmán.
Las cincuenta personas
asistentes debatieron el estado actual del dialecto canario, hubo un homenaje a
Dolores Campos-Herrero, se analizó la situación del teatro, se celebró una
sesión sobre las asociaciones, el viento no dificultó el recital en el mirador
de Unamuno, en Artenara y, sobre todo, la estrella fue una visita al centro de
interpretación de Risco Caído en el centro de Artenara, el reconocimiento de la
Unesco sobre los espacios cumbreros de la isla ha sido un regalo para quienes
sienten la conciencia de identidad. Una mesa sobre las revistas literarias,
otra sobre la literatura hispanoamericana y la visita del Museo etnográfico de
Juan Cubas en Barranco Hondo fueron actos significativos, que dieron paso al
recital de poetas jóvenes, el taller del pan de papas elaborado por el propio
Miguel Díaz y la mesa de la canción de autor. Luego fue interpretada la obra de
teatro Desconfianza, escrita por Pedro Lezcano cuando tenía 25 años. El masivo
homenaje a Elsa López centró los actos del domingo 26 y previamente fue la
conferencia de Juan Francisco Santana sobre la escritora Hilda Zudán, aunque todavía
no se han desvelado las circunstancias personales de esta mujer, cuya memoria
desaparece tras la guerra civil. También
la iglesia del pueblo dio pie al concierto del acordeonista Miguel Afonso, con
solistas invitados, a cargo de Folk Canarias, acto bastante nutrido porque
atrajo a vecinos de la zona.
Juncalillo y Barranco
Hondo no pasan desapercibidos, y las casas-cueva son una oportunidad para los
urbanitas estresados, pues en ellas encontrarán silencio, frutales, el picor
del frío. El modesto restaurante servía las comidas, y unos desayunos
contundentes, también ejerció como lugar de alojamiento para buena parte de los
inscritos. Hubo ayudas institucionales, seguro que el presupuesto estuvo muy
ajustado.
La cumbre ofrece una belleza reseca, con sus barrancos profundos, sus presas, sus neblinas, sus celajes y sus caseríos. Se ha instalado una embotelladora de agua mineral que aprovecha el vapor de agua que viene con las nubes, es una técnica similar a la adoptada en los desiertos de Chile. A lo largo de la carretera vemos parcelas que han sido adquiridas por el Cabildo con el fin de repoblarlas con pino canario. En cuestión de reverdecer, siempre quedará mucho por delante. Y ojalá la lluvia nos visite.