Olga Tokarczuk, escritora polaca de 57 años, obtuvo el Nobel de 2018 mientras que Peter Handke ganó el de 2019, concedidos ambos premios conjuntamente ya que el año pasado la Academia sueca no entró el galardón. La editorial Anagrama ha sacado a la luz uno de sus libros más importantes, una novela fragmentaria, un texto híbrido en el que se combina la autobiografía, el libro de viajes, el cuento, el ensayo filosófico, un conjunto de mapas y dibujos. Es decir que la novela incorpora muchos materiales y la autora reivindica el fragmento, la nota suelta, el apunte a vuelapluma, vivencias, sueños, ficciones. La crítica dice que la exaltación de lo fragmentario e incompleto no constituye en este caso un tributo al desorden, sino que se trata de una declaración de principios. Humor y escepticismo, ingenio a raudales en sus casi 400 páginas.
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